En la actualidad resulta complicado acertar a la primera a la hora de decantarse por según qué cosas.
Una de esas complicadas elecciones a las que, tarde o temprano, el que más y el que menos habrá de enfrentarse es la elección de los suelos y pavimentos que darán personalidad a su hogar, empresa o negocio.
Y es que, tal y como indican desde Pavimentos Decoart, expertos en la instalación de suelos de madera y pavimentos, ”la multitud de materiales y acabados que existen en la actualidad, todos con grandes prestaciones y propiedades, complican enormemente la elección adecuada de los suelos y pavimentos de empresas, hogares y negocios”.
Pero, ¿cuáles son los materiales más empleados en los suelos?
Entre los materiales que cuentan con un mayor número de adeptos se encuentra la madera, principalmente por la calidez que es capaz de aportar a cualquier estancia. Los suelos de madera son únicos, sostenibles y con una belleza natural irresistible, pero requieren de mantenimiento y son sensibles a los impactos.
Los que huyen de los mantenimientos pero no desean prescindir de la calidez que aporta la madera suelen optar por los suelos laminados que, además de su sencilla instalación, son más resistentes y baratos que los de madera. En la actualidad presentan distintos acabados que además de imitar la madera, imitan tela, cuero, mármol, pizarra, y un sinfín de otros materiales.
Por su parte, los suelos cerámicos y porcelánicos son la opción más elegida para cocinas, baños y, también, terrazas debido a su enorme durabilidad, a su fácil mantenimiento, así como al amplio abanico de acabados que ofrecen, capaces de adaptarse a todos los gustos y bolsillos. Sus principales desventajas son que se trata de pavimentos fríos y porosos.
“Entre los suelos que más adeptos han ido ganando en la actualidad se encuentran los suelos de vinilo y PVC, esto se debe fundamentalmente a que resultan muy económicos y se consigue decorar y revestir en un solo gesto”. Pero, además, son ideales para ambientes húmedos y no requieren de mantenimiento.
El microcemento y el cemento pulido han incrementado en los últimos años su demanda debido a su durabilidad y ausencia de mantenimiento.
Sin embargo, otros materiales como las moquetas, tan instaladas hace algunas décadas, han quedado prácticamente relegados a los eventos y han dado el salto a los espacios exteriores, donde siguen ganando popularidad.
